Balance Fisico - Mental - Espiritual modificando el estado del tejido blando

11.03.2012 10:25

Los masajes terapéuticos ayudan a modificar el estado de los tejidos correspondientes a la zona orgánica en tratamiento además de que repercute favorablemente sobre el estado físico general de un paciente.

Se trata de un conjunto de maniobras que se llevan a cabo de manera metódica sobre un área específica del organismo, aplicando estiramientos y compresiones rítmicas. Los masajes terapeuticos se consideran una terapéutica pasiva, ya que el paciente es quien se deja manipular mientas entra en un estado de relajación y es importante tener en cuenta que los objetivos de estas técnicas, además de terapéuticos, suelen ser también preventivos. Por otro lado debemos destacar que, en la actualidad, los masajes terapéuticos han llegado a alcanzar un lugar privilegiado en la rama de la medicina que se dedica a la prevención y rehabilitación.

Según las técnicas que se empleen en las sesiones de masajes terapéuticos, los mismos producirán sobre el organismo diferentes efectos fisiológicos que son consecuencia de los mecanismos de defensa refleja, que a su vez, es el resultado de los estímulos cutáneos que son originados mediante el sistema nervioso en aquellos casos donde el efecto de debe a la presión producida por los masajes terapéuticos. Esta acción

refleja producida por la estimulación del masaje terapéutico, resulta ser un fenómeno del sistema nervioso; además, le da lugar a la dilatación de los pequeños vasos sanguíneos aumentando la permeabilidad capilar que paralelamente produce un efecto relajante. Los masajes terapéuticos también tienen una acción directa sobre la circulación sanguínea y linfática que es producida por el mecanismo reflejo.

En este sentido podemos decir que un estimulo suave va a producir un dilatación transitoria de los vasos linfáticos provocando un enrojecimiento en los tegumentos y cuando el estímulo se comienza a intensificar, provocará la aparición de isquemia, y la dilatación capilar. En un aspecto más mecánico, los masajes terapéuticos constituyen una gran ayuda para la circulación y esto se debe a que los mismos favorecen el retorno linfático y venoso además de prevenir la estasis vascular.

A través de la presión que se ejerce en los tratamientos con masajes terapéuticos ambos sistemas comienzan a vaciarse rápidamente y colapsan provocando que el líquido se desplace a la zona que se encuentra comprimida.

Por otro lado, los masajes terapéuticos también poseen efectos beneficios sobre la piel, ya que en las primeras sesiones es normal que la misma tome una textura mucho más suave y más fina, pero a medida que las sesiones de masajes terapéuticos vayan avanzando, ésta se sentirá mucho más dura al tacto pero sin perder la suavidad conseguida. Además, a medida que el masaje va abarcando mayor parte de la superficie de la piel, la va limpiando de todas las impurezas grasosas de la misma manera que elimina las células muertas que se acumulan. Por otra parte favorece a la transpiración despejando los conductos correspondientes a las glándulas sudoríparas.

Maniobras utilizadas en los masajes terapéuticos

Los masajes terapéuticos utilizan maniobras fundamentales para que puedan lograr sus objetivos. En primera instancia esta la frotación que se realiza con gran suavidad deslizando la palma de la mano sobre la superficie que está siendo masajeada. Es conveniente que la mano, manteniendo un ritmo lento, vaya recorriendo varias zonas llevando una dirección que generalmente es en dirección de las fibras musculares. Es importante que la presión sea gradual, uniforme y especialmente suave.

Otra maniobra es la de fricción, en donde no existe el deslizamiento de la mano ya que en este caso la misma debe adherirse firmemente a la piel, movilizándola sobre el plano superficial. El amasamiento por su parte se trata de comprimir y movilizar los músculos y los tendones que la mano va tocando. Habitualmente se utilizan las dos manos, aunque con una también se obtiene el mismo efecto, pero lo importante es que el masaje terapéutico llevado a cabo con esta técnica abarque el grupo muscular con un movimiento de estiramiento o bien, circular.

La percusión consiste en pequeños golpecitos enérgicos a los tejidos. Para poder llevar a cabo correctamente este movimiento de martilleo es preciso que la mano se disponga de la manera que resulte más conveniente para cada caso, de esta manera, la percusión podrá realizarse con la palma de la mano o con la yema de los dedos. La última maniobra que se utiliza para los masajes terapéuticos es la de vibración en donde la mano se encuentra firme al contacto del pie, trasmitiendo una especie de temblor rítmico a los músculos del antebrazo quienes reducen la vibración son los dedos.